Dormir es un componente esencial de la buena salud y el bienestar. Desafortunadamente, muchos adolescentes tienen dificultades para dormir lo suficiente debido a los horarios escolares, las actividades extraescolares, la vida social y otros compromisos. En esta guía completa, exploraremos la importancia del sueño para la salud física y mental de los adolescentes y brindaremos consejos prácticos para mejorar los hábitos de sueño.

¿Por qué es importante dormir para los adolescentes?
Beneficios para la salud física
Dormir lo suficiente es fundamental para la salud física de los adolescentes. Durante la adolescencia, el cuerpo pasa por importantes crecimientos y cambios que requieren un adecuado descanso reparador. Algunos beneficios físicos clave de dormir lo suficiente incluyen:
- Función mejorada del sistema inmunológico.: Dormir ayuda al cuerpo a combatir las infecciones, lo que hace que los adolescentes sean menos susceptibles a las enfermedades.
- Menor riesgo de obesidad: La falta de sueño puede provocar aumento de peso y obesidad en los adolescentes.
- Reducción del riesgo de enfermedades crónicas.: Los adolescentes que duermen lo suficiente tienen un menor riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como diabetes o enfermedades cardíacas.
- Mejor rendimiento deportivo: Dormir lo suficiente puede mejorar el rendimiento deportivo al mejorar la velocidad, la precisión y los tiempos de reacción.
Beneficios de salud mental
Además de sus beneficios físicos, un sueño de calidad también es importante para mantener una buena salud mental en los adolescentes. Sin suficiente cantidad de sueño reparador:
- Los adolescentes pueden ser más propensos a sufrir síntomas de ansiedad o depresión: La falta de sueño puede provocar cambios de humor e inestabilidad emocional, lo que aumenta el riesgo de sufrir trastornos de salud mental como ansiedad y depresión.
- La consolidación de la memoria podría verse afectada: El sueño juega un papel crucial en la consolidación de la memoria, que es esencial para aprender nueva información.
- La creatividad que se ve obstaculizada y la formación de nuevas ideas pueden verse afectadas: La falta de sueño puede sofocar la creatividad y la capacidad de generar nuevas ideas.
Logro académico
El sueño beneficia al cerebro y promueve la atención, la memoria y el pensamiento analítico. Agudiza el pensamiento, reconoce la información más importante para consolidar el aprendizaje y facilita el pensamiento expansivo que puede estimular la creatividad. Ya sea estudiando para un examen, aprendiendo un instrumento o adquiriendo habilidades laborales, dormir es esencial para los adolescentes. Los adolescentes que no duermen lo suficiente tienden a sufrir somnolencia excesiva y falta de atención que puede perjudicar su rendimiento académico.
Toma de decisiones y comportamiento riesgoso
La falta de sueño puede afectar el desarrollo del lóbulo frontal, una parte del cerebro fundamental para controlar el comportamiento impulsivo. Los estudios han encontrado que los adolescentes que no duermen lo suficiente tienen más probabilidades de tener conductas de alto riesgo, como conducir en estado de ebriedad, enviar mensajes de texto mientras conducen, andar en bicicleta sin casco y no usar el cinturón de seguridad. El consumo de drogas y alcohol, el tabaquismo, las conductas sexuales de riesgo, las peleas y la portación de armas también son más comunes en los adolescentes que duermen muy poco.
¿Cuántas horas de sueño necesita un adolescente?
Los expertos recomiendan que los adolescentes de entre 13 y 18 años duerman de 8 a 10 horas por noche. Pero esta recomendación cambia para los preadolescentes y los adolescentes adultos. Sin embargo, cada adolescente es diferente y algunos necesitan dormir más de la cantidad recomendada por noche, mientras que otros pueden necesitar menos.
¿Duermen lo suficiente los adolescentes en Estados Unidos?
Según casi todos los indicios, muchos adolescentes en Estados Unidos no duermen las 8 a 10 horas recomendadas por noche. Alrededor de 6 de cada 10 estudiantes de secundaria y 7 de cada 10 de secundaria no duermen lo suficiente durante las noches escolares. Se ha descubierto que la falta de sueño es mayor entre las niñas y las personas a las que se les asignó el sexo femenino al nacer. Los adolescentes mayores informan que duermen menos que los adolescentes más jóvenes.
La importancia de un horario de sueño constante
Una forma de mejorar la capacidad de dormir de su hijo es desarrollar un horario diario en el que tenga clases o actividades extracurriculares de manera constante en días determinados y en horarios específicos. Esto puede ayudarles a crear rutinas organizadas a su alrededor, como establecer una rutina nocturna antes de acostarse que generalmente le indica a su cuerpo y mente que es hora de relajarse.
El impacto del tiempo frente a la pantalla en el sueño
Un par de horas antes de acostarse, establezca algunas reglas para desactivar las pantallas; Ya sea que la pantalla del teléfono o del portátil estimule la actividad cerebral haciendo más complicado calmarse más adelante. En su lugar, intente fomentar la lectura o escuchar música relajante.
Consejos y trucos para mejorar los hábitos de sueño
Desarrolle un horario de sueño constante
Una forma de mejorar la capacidad de dormir de su hijo es desarrollar un horario diario en el que tenga clases o actividades extracurriculares constantemente en días concretos y en momentos específicos, de modo que pueda crear rutinas organizadas a su alrededor, como establecer una rutina nocturna antes de acostarse que generalmente le indica a su cuerpo y mente que es hora de relajarse.
Limite el tiempo frente a la pantalla antes de acostarse
Un par de horas antes de acostarse, establezca algunas reglas para desactivar las pantallas; Ya sea que la pantalla del teléfono o del portátil estimule la actividad cerebral haciendo más complicado calmarse más adelante. En su lugar, intente fomentar la lectura o escuchar música relajante.
Crear un ambiente óptimo para dormir
Tener un entorno propicio para dormir puede marcar la diferencia entre un sueño profundo y reparador y dar vueltas y vueltas inquietas. A continuación se ofrecen algunos consejos para crear un ambiente óptimo para dormir:
- Crear un espacio oscuro con cortinas que bloqueen la luz: Esto puede ayudar a indicarle a su cuerpo que es hora de dormir.
- Mantener los aparatos electrónicos lejos de la cama: Esto incluye teléfonos móviles. La luz de estos dispositivos puede interferir con la producción corporal de melatonina, una hormona que regula el sueño.
- Usar temperaturas y colores de iluminación fríos: Los colores más fríos pueden ayudar a crear un ambiente calmante propicio para dormir.
Conclusión
Los adolescentes llevan vidas ocupadas con actividades académicas, extracurriculares y eventos sociales. Dormir bien no siempre es una prioridad en sus mentes, pero cambiar los hábitos mencionados gradualmente definitivamente será útil durante los años de escuela secundaria y más allá hasta la vida adulta, que también es bastante ocupada. Si sigue estos consejos para una buena higiene del sueño e incorporándolos a una rutina de estilo de vida saludable, verá que su hijo adolescente obtiene la cantidad óptima de sueño reparador necesario para realizar las tareas diarias y sus objetivos personales mientras mantiene una salud física y mental de primer nivel.
preguntas frecuentes
La Academia Estadounidense de Medicina del Sueño recomienda que los adolescentes de 14 a 17 años duerman entre 8 y 10 horas por noche. Esto es crucial para su bienestar físico, cognitivo y emocional.
Tecnologías como los teléfonos inteligentes y las tabletas emiten luz azul que puede suprimir la producción de melatonina y alterar los patrones de sueño. Es importante limitar el tiempo frente a la pantalla antes de acostarse o utilizar herramientas como filtros de luz azul en los dispositivos.
Sí, lo que comemos puede afectar en gran medida nuestra capacidad para conciliar el sueño y permanecer dormido. Evitar la cafeína y los alimentos azucarados cerca de la hora de acostarse puede mejorar la calidad general del descanso. El consumo de alimentos ricos en triptófano, como productos lácteos o aves, también puede promover un mejor sueño.